El término fue acuñado por Ramón A. Laval, luego de que encontrase en la Biblioteca Nacional de Chile, en 1910, el libro el Modo de ganar el Jubileo Santo, y que fue publicado en una edición facsimilar donde utilizó el término.[3] En sus propias palabras: «A los modestos impresos santiaguinos anteriores a la prensa de la Aurora de Chile, se les ha dado el nombre de incunables chilenos, pues ellos pertenecen al período de la cuna del arte en nuestro país».[1]
Listado de incunables chilenos
El listado de incunbales chilenos está compuesto por 42 ejemplares.[4]
↑ abLaval, Ramón A. (1910). Un incunable chileno: modo de ganar el Jubileo Santo: año de 1776. Imprenta Universitaria. pp. 12-14. Consultado el 6 de marzo de 2017. «A los modestos impresos santiaguinos anteriores a la prensa de la Aurora de Chile, se les ha dado el nombre de incunables chilenos, pues ellos pertenecen al período de la cuna del arte en nuestro país».