La laguna de Somolinos se sitúa al pie de la sierra de Pela, cuya ladera sur presenta un paisaje caracterizado por pastos de montaña y matorral de ernáceas, con una cuenca visual muy amplia. La laguna supone un enclave de gran variedad cromática y alto valor paisajístico, en el entorno de mayor aridez que presentan las laderas que cierran el valle del Manadero.
La laguna de Somolinos tiene su origen en el represamiento de las aguas del río del Manadero por un dique de travertinos. Es de carácter exorreico, recibiendo sus aportes hídricos principalmente del río, y en menor medida por surgencias y a partir del agua de precipitación recogida en la microcuenca de la laguna. En los años muy lluviosos se produce la inundación somera de zonas opcupadas por vegetación marginal en la franja perilagunar, pudiendo permanecer estos terrenos encharcados durante varios meses.
La superficie inundable ordinaria que constituye el vaso lagunar es de 3,8 has. La altura de la lámina de agua en la zona más profunda puede superar los siete metros.
Limnología
La laguna de Somolinos es de origen cárstico, de aguas dulces, situada en el fondo de un valle por cerramiento travertínico. Se trata de un sistema lacustre frágil y singular por su génesis, que lo convierte en un tipo de lago muy poco frecuente a nivel europeo.
Aunque la calidad de las aguas es muy alta, se aprecia una contaminación difusa, de baja intensidad conducida por el río, principalmente por carga de nitrato.
La vegetación acuática de la laguna de Somolinos está constituida por formaciones compactas de Magnocharetum hispidae, que forman tapices en el fondo y en las paredes de la cubeta, y Groenlandia densa.
La vegetación marginal está integrada, en la orilla de la laguna, por carrizos y juncos, propios de suelos encharcados que pueden sufrir al final del verano una cierta desecación, y por Cladium mariscus. Hacia el exterior de la laguna estas formaciones son substituidas por macollas de cárices.
Hacia las zonas menos inundadas se reconocen praderas dominadas por el junco de laguna, que entran en contacto con las praderas de Juncus inflexus. En la zona norte de la laguna, por donde vierte el río del Manadero, aparecen reducidas extensiones de prados de siegabasófilos. En las márgenes de los arroyos que llegan hasta la laguna aparecen sauces rodeados por zarzales. En algunas zonas esta vegetación marginal ha sido substituida por plantaciones de chopos.
La ladera de la Cocinilla, junto a la laguna, está propuesta como «Global Geosite» (Lugar de interés geológico español de relevancia internacional) por el Instituto Geológico y Minero de España por su interés estratigráfico, con la denominación «MZ006: Laguna de Somolinos» dentro del grupo de contextos geológicos «El rifting de Pangea y las sucesiones mesozoicas de las cordilleras Bética e Ibérica».[1]