Edificado a mediados del siglo XX, fue inaugurado oficialmente el 18 de junio de 1952. Es la sede de la diócesis de Albacete y la residencia oficial del obispo de Albacete.[1]
Se trata de un edificio de estructura adintelada organizado en tres alturas, simétrico en torno a la parte central, más desarrollada con una gran puerta inferior sobre la que se encuentra un gran mirador que se proyecta hacia el exterior; el mirador está flanqueado por dos balconadas a los lados.